EPÍLOGO DE CIENTO VOLANDO DE BERBEL

     Hace bastante tiempo, BERBEL nos pidió a un gran número de escritores que le prestáramos un verso o una frase dedicada a las aves.

   Tenía una idea muy linda que hacer con todo ese posible material literario, y era realizar un listado con todas las frases recibidas, como si fuera un poema a escote, y añadirlo, a modo de epílogo al final de su poemario CIENTO VOLANDO.

   Al parecer a la editorial no le gustó la idea, pero eso no impidió que BERBEL mantuviera la fe en el concepto de su proyecto y se propuso recomponer una tira enorme en papel continuado con todos los versículos dispares pero que contenían alusión al mismo concepto [¡las aves, los pájaros, todo lo que vuela en libertad!], y la colocó a modo de pancarta a la derecha de la entrada de la sala de la Casa Colón de Las Palmas, hora y lugar donde se presentaba su libro recién publicado.

    Ella misma dudaría luego sobre si la mucha gente que asistió a la presentación del libro se dio cuenta tanto de la magnitud de ese poema como de su intencionalidad. Nos envió hoy ese poema a escote de versos o listado de frases que se encuentran en medio del aire al azar, para que los que atendimos su llamado hace tiempo, tengamos un recuerdo del hecho. Aunque nos advierte que hay autores que añadió por sus gustos poéticos particulares; algunos, como se sabe, ya están muertos o viven muy lejos de aquí.

    Me place reproducirlo aquí al lado en pdf para conocimiento de todos.

    Muchas gracias por compartir tantas cosas, amiga BERBEL. Y, como siempre, un abrazo enorme.

     Tu amigo y admirador, Alberto.