Que nos arranquen la memoria...

 

 © Alberto Omar Walls

 

Me asombra la fortaleza y actitud de determinados poetas. Y su resistencia al dolor humano, aunque en él cuando lo asumen, encuentren, llegado el momento de trasladarlo al poema, sus más altas cotas de genialidad poética. Este poema de aquí [Rima LII de Gustavo Adolfo Bécquer] me viene ni que pintado para los actuales momentos tormentosos que nos ocupan en las Islas Canarias.

 

 

Medio encerrados en las casas, oteando por los cristales las nubes y los rayos, controlando el comportamiento del mar, fisgando, olfateando cualquier mínimo silbo del viento que se cuela por las rendijas…

 

Cuando lo leo, o le oigo decir a Bécquer, Olas gigantes que os rompéis bramando, Ráfagas de huracán que arrebatáis, Nubes de tempestad que rompe el rayo, Llevadme con vosotras… no puedo por menos que estremecerme al descubrir la propiedad profunda con la que el poeta ensambla la Naturaleza desatada con sus propias emociones arrebatadas o en estado de éxtasis.

 

Y me asombra no solo que las emociones sean llevadas hasta un nivel impredecible, sino que aún se permita que le arrullen unos cantos de sirenas tan autodestructivos.

 

Ah, pero qué hermoso juego [que en algo me recuerda a Cernuda], me brinda ahora, lector virtual del escritor del XIX, esos versos encabalgados cuando dice Llevadme por piedad. Por piedad, adonde el vértigo con la razón me arranque la memoria.

 

Evidentemente, ser romántico era ser de otra época. Pero no estaría nada mal que olas gigantes, rayos, tempestades… nos arrancaran la memoria.

 

Rima LII  [Gustavo Adolfo Bécquer]

                                          

Olas gigantes que os rompéis bramando

En las playas desiertas y remotas,

Envuelto entre las sábanas de espumas,

Llevadme con vosotras.

 

Ráfagas de huracán que arrebatáis

Del alto bosque las marchitas hojas,

Arrastrado ciego torbellino,

Llevadme con vosotras.

 

Nubes de tempestad que rompe el rayo,

Y en fuego ornáis las desprendidas orlas,

Arrebatado entre la niebla oscura,

Llevadme con vosotras.

 

Llevadme por piedad,

Por piedad, adonde el vértigo

Con la razón me arranque la memoria,

Por piedad, tengo miedo 

De quedarme con mi dolor a solas.

https://www.facebook.com/alberto.omarwalls